Existen minúsculas diferencias de ángulo entre los ejes de transmisión durante la operación. Para compensar esto, una junta realizada con un revestimiento de acero vulcanizado, se localiza entre la transmisión y el eje de accionamiento o semieje; o, en coches con ejes cardan, entre el eje de transmisión de cardan y el eje o cardan y diferencial.

Este par cinemático, patentado en 1938 por el inventor Inglés John Leslie Hardy, amortigua las pequeñas diferencias de ángulo y desalineaciones entre los ejes a unir, y minimiza los choques durante la transmisión de potencia con su goma elástica al mismo tiempo. Estos choques o sacudidas, tienen lugar en los cambios de carga (cambios de marcha) durante la aceleración o la marcha atrás.

El par cinemático con recubrimiento textil, o diseños de caucho puro, son usados únicamente para diferencias de ángulo y desviaciones más bien pequeñas. Los desajustes de mayor entidad subirían la temperatura dentro de la articulación por los enormes esfuerzos de flexión, esto quiere decir que se destruiría de manera rápida.

Debido a la flexión y el envejecimiento natural del caucho o elastómero, de edad avanzada, las articulaciones textiles tienen tendencia a desgastarse, esto deriva en problemas graves durante la ITV que significarían que usted debe fijarse en esto tan pronto como sea posible.

Un par cinemático desgastado por completo se puede escuchar si a una velocidad de 80 km/h con sin que haga falta cargar el coche. Se escuchará un zumbido agudo, metálico.

Hay otro eje cinemático menor entre el eje de dirección y el mecanismo de dirección, cuyo trabajo no le exige grandes solicitaciones, y por ello no sufre desgaste.

Estas articulaciones están disponibles como conjunto completo, incluyendo tornillos, o como piezas individuales de articulaciones. Hay que atender al comprar los tornillos correspondientes durante la adquisición.

¡Se necesitará un ascensor para cambiar un par cinemático!